En la semana la gente de Chillán se encargaba de hablar, y Curicó, de trabajar en silencio, con equilibrio, y con la convicción de que la victoria se quedaría en la Granja. El viejo adagio dice: “Por la boca muere el pez” ¡y así no más fue! Ricardo Toro daba declaraciones durante la semana que Curicó no jugaba a nada- primer error- siempre un equipo juega a algo, a veces no puede resultar pero siempre de una u otra forma se intenta ir por un triunfo.
Segundo error: “Curicó sólo juega al pelotazo” decía el técnico Toro. Los balones aéreos, con intención ya sea buscando la cabeza de un atacante o la profundidad a espaldas de un defensa se denominan centros o balones con intención, no pelotazos, armas o variantes sumamente válidas dentro de esto que se llama fútbol.
Curicó Unido con actuación maciza, sólida defensivamente, equilibrada en mediocampo y certera en ofensiva logró quedarse con una victoria importantísima ante el equipo de Ñublense de Chillán. Esta vez como ante el Morning se jugaba bien, pero a diferencia de ese partido se concretaron las ocasiones, apareció el finiquito y la capacidad goleadora de Valenti y Díaz.
Sería realmente injusto nombrar una figura en particular. Si habría que destacar a una, esta sin a lugar a dudas fue el equipo en su totalidad. Todas las líneas muy sólidas, compactas, solidarias y certeras. Lo colectivo es lo que trabaja y rescata siempre Marcoleta, y hoy, así lo demostró, ¡Felicitaciones muchachos!
Más allá de hablar del partido, que Curicó lo ganó con absoluto merecimiento de principio a fin, hablar de la gente se convierte en un deber. Los triunfos ante el elenco del sur, tienen un sabor especial. Especial porque la historia nos obligaba o nos obligara siempre a lavar esas heridas que a veces el fútbol marca a fuego, como aquella del año 2004. Y hoy así se hizo-como siempre se debe hacer- con buen fútbol y un verdadero carnaval en las gradas, donde los albirrojos pusieron el sabor, el color y la pasión.
Una Granja repleta, ¡quizás! ya algo vieja- ya se vendrá la nueva- sus pastos recibían el trajín de los leones Curicanos tanto en la cancha como en los vetustos tablones. Sudor y más de alguna lágrima quedo impregnada en nuestro campo deportivo, como tantas veces, pero que hoy nos hizo más dulce nuestras vidas, como para apagar esa amargura del año 2004. Se me hace imposible borrar de la memoria, y no es ser masoquista, esos rostros tristes de Cristian Sánchez, de Johan Fuentes, el “Pato Castro, del “mufaza” Aravena, etc… y de tantos Curicanos que esa noche en Linares el fútbol nos regalo una jornada triste, pero que al final nos ha hecho mas grandes. Superamos el dolor de la derrota y hoy podemos sentirnos con derecho adquirido dueños de la victoria y de la esperanza.
Para toda la gente que ama nuestra camiseta, este triunfo por 3 goles a 0 es una inyección de alegría, emoción y fuerzas para que ¡todos!, junto a nuestro plantel miremos y busquemos con optimismo el camino de la victoria.
Sin soberbia, pero sí con orgullo disfrutemos la dulzura del triunfo, ¡está merecido señores!, se obtuvo con el derecho que da el vencer con fútbol, ¡y no pelotazos!, con juego limpio como lo demostró el “Gran Curi” hoy ante casi 5000 personas. Esta vez la torta alcanzó para todos, sólo hubo fiesta en la granja, y la gente de más al sur- auque no lo hizo- debió aplaudir, el gran carnaval albirrojo.Gran frase la del “zorrito” Álamos: “el té mañana será mas dulce y la marraqueta mas grande”. ¡Que razón tiene Luchito! Grande Curi.
Segundo error: “Curicó sólo juega al pelotazo” decía el técnico Toro. Los balones aéreos, con intención ya sea buscando la cabeza de un atacante o la profundidad a espaldas de un defensa se denominan centros o balones con intención, no pelotazos, armas o variantes sumamente válidas dentro de esto que se llama fútbol.
Curicó Unido con actuación maciza, sólida defensivamente, equilibrada en mediocampo y certera en ofensiva logró quedarse con una victoria importantísima ante el equipo de Ñublense de Chillán. Esta vez como ante el Morning se jugaba bien, pero a diferencia de ese partido se concretaron las ocasiones, apareció el finiquito y la capacidad goleadora de Valenti y Díaz.
Sería realmente injusto nombrar una figura en particular. Si habría que destacar a una, esta sin a lugar a dudas fue el equipo en su totalidad. Todas las líneas muy sólidas, compactas, solidarias y certeras. Lo colectivo es lo que trabaja y rescata siempre Marcoleta, y hoy, así lo demostró, ¡Felicitaciones muchachos!
Más allá de hablar del partido, que Curicó lo ganó con absoluto merecimiento de principio a fin, hablar de la gente se convierte en un deber. Los triunfos ante el elenco del sur, tienen un sabor especial. Especial porque la historia nos obligaba o nos obligara siempre a lavar esas heridas que a veces el fútbol marca a fuego, como aquella del año 2004. Y hoy así se hizo-como siempre se debe hacer- con buen fútbol y un verdadero carnaval en las gradas, donde los albirrojos pusieron el sabor, el color y la pasión.
Una Granja repleta, ¡quizás! ya algo vieja- ya se vendrá la nueva- sus pastos recibían el trajín de los leones Curicanos tanto en la cancha como en los vetustos tablones. Sudor y más de alguna lágrima quedo impregnada en nuestro campo deportivo, como tantas veces, pero que hoy nos hizo más dulce nuestras vidas, como para apagar esa amargura del año 2004. Se me hace imposible borrar de la memoria, y no es ser masoquista, esos rostros tristes de Cristian Sánchez, de Johan Fuentes, el “Pato Castro, del “mufaza” Aravena, etc… y de tantos Curicanos que esa noche en Linares el fútbol nos regalo una jornada triste, pero que al final nos ha hecho mas grandes. Superamos el dolor de la derrota y hoy podemos sentirnos con derecho adquirido dueños de la victoria y de la esperanza.
Para toda la gente que ama nuestra camiseta, este triunfo por 3 goles a 0 es una inyección de alegría, emoción y fuerzas para que ¡todos!, junto a nuestro plantel miremos y busquemos con optimismo el camino de la victoria.
Sin soberbia, pero sí con orgullo disfrutemos la dulzura del triunfo, ¡está merecido señores!, se obtuvo con el derecho que da el vencer con fútbol, ¡y no pelotazos!, con juego limpio como lo demostró el “Gran Curi” hoy ante casi 5000 personas. Esta vez la torta alcanzó para todos, sólo hubo fiesta en la granja, y la gente de más al sur- auque no lo hizo- debió aplaudir, el gran carnaval albirrojo.Gran frase la del “zorrito” Álamos: “el té mañana será mas dulce y la marraqueta mas grande”. ¡Que razón tiene Luchito! Grande Curi.
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